CATEQUESIS CONFIRMACIÓN – Dios crea al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza (tema 8)
¿Qué es el hombre para que te acuerdes de él, el ser humano, para mirar por él? Sal 8, 5

El hombre y al mujer son la cumbre de la creación visible. Dios los creó a su imagen y semejanza, libres, capaces de amar y de conocer la verdad, e iguales en dignidad.
- ENTRADA
¿Qué tarea tengo esta semana? ¿He realizado los compromisos de la semana pasada? ¿Cómo ha sido llevarlos a cabo?
- VER – Miramos nuestra realidad
Asombrados por la grandeza y, al mismo tiempo, por la fragilidad del ser humano, a veces nos preguntamos:
¿Qué es el hombre?
Gén (2, 7-9, 16-25)
- Dios crea al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza. Es decir, parecidos a Él. Nos parecemos sobre todo, en el amor y la libertad.
- Distinguimos lo bueno de lo malo y podemos elegir. Pensamos por nosotros mismos ya que somos libres.
- Hombres y mujeres, más sabios o menos, más pobres o ricos: todos somos iguales, porque somos hijos de Dios, con idéntica dignidad.
¿De dónde procede el hombre? Nuestra experiencia nos dice que el hombre es distinto al resto de seres vivos: puede conocerse a sí mismo y lo que le rodea, puede decidir, amar, hablar…Cada uno de nosotros ha sido pensado, creado y amado por Dios. Nuestro origen está más allá de nuestros padres. Venimos de Dios, quien crea el alma de cada uno.
Los científicos han comprobado que el hombre ha cambiado a lo largo de la historia; o sea, ha evolucionado corporalmente. En el inicio de la humanidad, teníamos la piel oscura y, con el paso del tiempo la piel se fue adaptando al clima y tomando color. Evolucionar significar variar la forma de la cabeza, los huesos, el color de la piel…. La ciencia conoce, con ciertos detalles, el paso de esas modificaciones.
El hombre apareció hace más de un millón y medio de años. La Biblia nos cuenta que esto sucedió cuando Dios puso aliento de vida en el polvo de suelo. Dios se sirvió de un antepasado no humano para darle el espíritu, cuando le da el espíritu lo convierten así en hombre. El hombre no es un animal más evolucionado, porque tiene espíritu. El alma de cada uno, creada por Dios, nos hace humanos, nos hace personas.
- JUZGAR – ¿Qué nos dice Jesús?
El alma humana. Con frecuencia, en la Biblia el término “alma” se refiere a la vida humana o a la totalidad de la persona humana. Designa también lo que hay de más valor y más íntimo en toda persona, el yo en el que reside su conciencia y voluntad. “Alma” significa el principio espiritual en el hombre, dotado de inteligencia y libertad e infundido por Dios mismo. En la persona el espíritu y la materia forman una unidad. En cada uno de nosotros, el alma espiritual es creada directamente por Dios y es inmortal.
Las personas tenemos un cuerpo y un espíritu. Ambos forman una unidad inseparable; no como el edificio, que está hecho de cemento más ladrillos, sino como el hidrógeno y el oxigeno se unen íntimamente para formar el agua. El alma es inmortal, y esta llamada a gozar de Dios tras nuestra vida en la tierra. Los animales no tienen alma.
Esto no es fácil de comprender, pero es así. Cuando un bebe se forma en el vientre de su madre, recibe de sus padres el cuerpo y a la vez, del mismo Dios recibe el alma. Dios crea el alma del bebe en el momento de su concepción. Esto ocurre con todas las personas del mundo, por eso las todas personas tenemos la misma dignidad y somos iguales en derechos.
La gloria de Dios es que el hombre viva, y la vida del hombre es la visión de Dios. La Biblia nos enseña que Dios infunde un soplo de vida al ser humano que lo convierte en un ser viviente. El hombre es la cumbre de toda su obra. La persona humana, porque ha sido creada a imagen y semejanza de Dios, tiene una dignidad superior al resto del universo y está llamada a representar a Dios en la tierra, participando de su poder y dominando todas las criaturas. La razón más alta de la dignidad humana consiste en la vocación del hombre y de la mujer a la comunión con Dios. El hombre es invitado al diálogo con Dios desde su nacimiento. Creer en Dios, confiar plenamente en él y dar asentimiento a todas las verdades por él reveladas, es la mayor grandeza y dignidad que podemos alcanzar. Dios mismo, al crear al hombre a su propia imagen, inscribió en su corazón el deseo de verlo. Aunque el ser humano a menudo lo ignore, Dios no cesa de atraerlo hacia sí, para que viva y encuentre en él la plenitud de verdad y felicidad a la que aspira sin descanso.
Ser hombre, ser mujer…no se elige, es un don que se recibe. La Biblia nos muestra que Dios ha creado a la persona humana: varón y mujer los creó (Gén 1, 27). Ambos poseen la misma dignidad y son imagen de Dios. La diferencia sexual indica que el hombre y al mujer están hechos el uno para el otro, para vivir la comunión de personas y la complementariedad sexual. Juntos están también llamados a transmitir la vida humana, formando en el matrimonio una sola carne (Gén 2, 24).
¿Qué es la providencia? Es el cuidado amoroso con que Dios conserva, sostiene y acompaña todas las cosas, especialmente a las personas.
- ACTUAR – ¿Qué podemos hacer?
Llamados a confiar en el Dios único, todopoderoso y providente. Los cristianos rezamos porque sabemos que Dios nos ha creado y es todopoderoso, que de él dependemos y por él existimos. El Señor nuestro Dios es solamente uno, nos ama con amor de padre y siente por nosotros ternura de madre. Hemos sido creados para conocerle, amarle y servirle.
Hoy hemos descubierto que Dios creó a la persona humana a su propia imagen y queriendo su plena felicidad; has podido comprobar que Dios te quiere y quiere estar a tu lado. ¿De qué manera vas a facilitar que Él te pueda acompañar? ¿Se te ocurre alguien que aún no conoce o conocer poco a Dios? ¿Te gustaría que lo hiciera? ¿Qué puedes hacer tú para ayudar a que así sea?
- DESPEDIDA – Alabanza por la vida
Jesús nos enseña a poner nuestra vida en manos del Padre, que es providente y cuida siempre de sus hijos (Mt 6, 26, 31-33)
Oh Dios, te alabamos y te damos gracias porque nos has dado la vida y siempre cuidas de nosotros. Porque nos amas creaste este mundo maravilloso en el que vivimos: las montañas, las plantas, los océanos. Porque nos amas creaste los animales que pueblan la tierra. Porque nos amas nos creaste a nosotros, tus amigos, invitándonos a cuidar de todo como Tú cuidas de nosotros. Envíanos, Señor, tu Espíritu Santo, pues queremos buscarte en todo cuanto nos rodea, descubrirte en el hermano que camina a nuestro lado y vivirte en cada acontecimiento de nuestra vida. Ayúdame, Señor, en este día a…
Tú eres grande, Señor, y muy digno de alabanza. Nos has hecho para ti y nuestro corazón está inquieto mientras no descanse en ti. (San Agustin)
Quizziz Tema 8: Dios crea al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza