DOMINGO 3º DE PASCUA(Ciclo B)

EVANGELIO (Jn 24,35-48)
En aquel tiempo, los discípulos de Jesús contaron lo que les había pasado por el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.
Estaban hablando de estas cosas, cuando él se presentó en medio de ellos y les dice:
«Paz a vosotros».
Pero ellos, aterrorizados y llenos de miedo, creían ver un espíritu. Y él les dijo:
«¿Por qué os alarmáis?, ¿por qué surgen dudas en vuestro corazón? Mirad mis manos y mis pies: soy yo en persona. Palpadme y daos cuenta de que un espíritu no tiene carne y huesos, como veis que yo tengo».
Dicho esto, les mostró las manos y los pies. Pero como no acababan de creer por la alegría, y seguían atónitos, les dijo:
«¿Tenéis ahí algo de comer?».
Ellos le ofrecieron un trozo de pez asado. Él lo tomó y comió delante de ellos.
Y les dijo:
«Esto es lo que os dije mientras estaba con vosotros: que era necesario que se cumpliera todo lo escrito en la Ley de Moisés y en los Profetas y Salmos acerca de mí».
Entonces les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras. Y les dijo:
«Así está escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se proclamará la conversión para el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Vosotros sois testigos de esto».
Meditación:
Quien más y quien menos, todos anhelamos vivir tranquilos y sin sobresaltos, lo que, en la práctica, no es nada sencillo. Cuando los discípulos reconocen al Resucitado en medio de ellos, este les regala la paz. Una paz que se mantiene de fondo incluso en medio de los trajines cotidianos, porque es mucho más que la mera serenidad o la ausencia de conflictos. La presencia del Señor en nuestras vidas nos pacifica por dentro, disipa las dudas y nos abre la mente y el corazón para comprender todo cuanto sucede, dándonos esa serena certeza de que, Quien entregó su vida por amor, permanece vivo y camina a nuestro lado. Así ¿cómo no ser testigos del Resucitado?
Oración:
Señor, abre mi mente para que te reconozca resucitado en medio de mi vida.
Acción:
Desea la paz a quienes encuentres hoy en tu camino.