“Eres único, eres única”

“Eres único, eres única” 

Eres un regalo para el mundo

En el siguiente papel, vamos a escribir nuestro nombre. A continuación, se lo vamos a pasar a la persona que tenemos a la izquierda. Esta persona va escribir lo que ve en ti: aquello que te hace especial, aquello que hace que seas genial y un regalo para los demás. Después, esta persona volverá a pasar el papel a su izquierda, así hasta que el papel vuelva a ti.

  • ¿Qué ha pasado?
  • ¿Qué es lo me hace ser diferente al resto de personas?

Eres único, eres única

Dios te quiere tal y como eres.

¡Eres genial!

¡Eres único!

Ahora es Dios el que te escribe: TE QUIERO… TAL Y COMO TÚ ERES.

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¿Cuánto crees que vales?

¿Cuáles son los mensajes que recibes sobre tu valor? Seguramente te habrán descalificado más de una vez. ¿Te acuerdas?

El verdadero valor del anillo

Un joven acudió a su maestro:

“Vengo, maestro, porque me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto. ¿Qué puedo hacer para que me valoren más?” –  El maestro lo miró en silencio y, al poco tiempo, se quitó el anillo que llevaba en la mano izquierda y, dándoselo, al muchacho, añadió:

“Vete al mercado. Debo vender este anillo porque tengo que pagar una deuda. Es necesario que obtengas por él la mayor suma posible, y no aceptes menos de una moneda de oro”.

El joven, extrañado, tomó el anillo y partió en su caballo. Apenas llegó al mercado, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes, que lo miraban con algo de interés hasta que el joven decía lo que pedían por él. ¡No le pagaban más de una moneda de plata! Abatido por su fracaso, montó en el caballo y regresó. Entró en la habitación.

“Maestro” – dijo- “Lo siento. Quizás hubiera podido conseguir dos o tres monedas de plata, pero no creo que pueda engañar a nadie respecto al verdadero valor del anillo”.

“Eso que has dicho es muy importante, joven amigo” – contestó sonriente el maestro-. “Debemos conocer primero el verdadero valor del anillo. Ve a ver al joyero. ¿Quién mejor que él puede saberlo? Dile que desearías vender el anillo y preguntarle cuánto te da por él. Pero no se lo vendas. Vuelve aquí con el anillo”.

El joven volvió a cabalgar. El joyero, después de examinar la joya, dijo al chico:

“Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender ya mismo, no puedo darle más de 58 monedas de oro por su anillo”.

“¡¿58 monedas?!” – exclamó el joven.

El joven corrió emocionado a casa del maestro a contarle lo sucedido.

“Siéntate”- dijo el maestro después de escucharlo-. “Tú eres como ese anillo: una joya, valiosa y única. Y como tal solo puede evaluarte un verdadero experto. ¿Por qué vas por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?”

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  • ¿Y tú? ¿Cuánto te reconoces y te aceptas? ¿Eres buen amigo de ti mismo? ¿Cómo te sientes así?
  • Ahora te toca a ti. Elabora una lista de las cosas que se te dan bien y otra de las que no sabes hacer… ¿Crees que vales menos por no saber hacer todo?

La mentira en el espejo

Sonrisa celestial, mirada azul… Un cuerpo escultural”

  • ¿Has vivido cerca la inseguridad de mirarte al espejo y no gustarte? ¿Sabes lo que es ocultarte a los demás, comportarte en tal manera que te vas quitando la vida, poco a poco, por gustar a los demás, por estar cada vez más delgada, por parecerte cada vez más a un ángel de Victoria Secret o por parecerte al actor con los mejores abdominales…?

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victoria secret

Un modelo es una referencia, un patrón al que parecernos. Todo queremos ser como ellos…

  • ¿Qué sensaciones despiertan en ti? ¿Te gustaría tenerlos o ser cómo ellos?
  • Piensa ahora en los modelos que tienes más cerca: un hermano, un amigo, un profesor… ¿Qué te atrae de ellos? ¿Cómo te sientes a su lado?
  • Mírate tú ahora: habrá cosas de ti que no te gusten… Piensa: ¿Cómo aceptarme tal como soy? Mírate con cariño: ¿no será mejor parecerme a mí y no a otro?

Nada volverá a ser como antes

Hoy quiero ir a encontrar, 
todo lo que hay dentro de mi. 
Sacar toda esa sensibilidad, 
que me acerque a ti, 
que me lleve allí. 
Y a pesar de todo me pregunto 
¿qué no di? 
Y al vivir me oculto 
mis defectos para poder dormir… 

Ya nada volverá a ser como antes, 
nunca dejaré que nada me cambie, 
estaremos conociendo nuestra parte original. 
Ya nunca volverá a ser como antes, 
nunca dejaré que nada me cambie, 
estaremos conociendo nuestra parte de verdad. 

Tras una sombra gris, 
que no me deja ver, 
podré esperar que pase algo hoy, 
con lo que tengo aquí, 
y no quiere salir. 

Y a pesar de todo…

(El Canto del Loco)

Crecemos mucho más cuando algo no funciona que cuando todo nos va bien. Aprendemos más de nuestros errores que de nuestros éxitos.

  • Colócate ante esas situaciones que te han hecho pasar mal: una ruptura, un fracaso, la muerte de alguien… Revive tus sensaciones.
  • Ahora escribe qué has aprendido para tu vida… Agradece que puedes sobreponerte a las desgracias: ya nada volverá a ser como antes…

Crecer

PAU GASOL

  • ¿Quieres meterte en la piel de Pau?
  • Cierra los ojos y recréate en su juego…
  • ¿Cómo sería Pau con tu edad? ¿Te lo imaginas? No era tan bueno como ahora… Pero amaba lo que hacía.. Y creció, aprendió… y triunfó… ¿Lo ves?
  • Y tú, ¿Qué llevas en el corazón? Imagínate haciendo el esfuerzo por poder conseguir algo en tu vida… Una competición contra ti mismo.

Ora

Pablo descubrió que Dios mide con otro rasero que el de los hombres: Dios ha elegido lo que el mundo considera débil para confundir a los fuertes y lo que es nada para anular a lo que se creen que son algo. (1 Corintios 1, 27-28)

  • Pregúntate: ¿Cuánto valgo para Dios?
  • Repite las palabras de Pablo y descubre que Él te quiere en tu debilidad y pequeñez… Agradece su amor y siente vales mucho más de lo que jamás pudieras imaginar…

¡Jesús es también modelo! Él quiere serlo para nosotros hoy. Aprended de mí, que soy sencillo y humilde de corazón, y hallaréis descanso para vuestras vidas. (Mateo 11,29)

  • Imagina el rostro de Jesús… Seguro que era atractivo… Su forma de ser, su manera de comportarse con todos, sus palabras… atraían a la gente: Tenía autoridad…
  • Escucha sus palabras… Aprende de mí, porque soy sencillo… ¿Qué sientes? ¿Crees que puede ser interesante aprender de él? Pídeselo…
  • Sitúate ante el espejo… ¿Lo puedes hacer sin juzgarte? ¿Sabes lo que es una mirada amorosa a hacia ti mismo?
  • Dios te mira así, con amor, porque vales para él más que nada en el mundo… Imagina que él está detrás del espejo y que, cada vez que te miras en él, te dice: YO TE QUIERO COMO TÚ ERES.

Dice el apóstol Pablo: Olvidando lo que he dejado atrás, me lanzo de lleno a la consecución de lo que está delante y corro hacia la meta, hacia el premio al que Dios me llama desde lo alto. (Filipenses 3, 13-14)

Ser cristiano tiene mucho de deporte…

  • Imagina que estás en una carrera de fondo… Corres y como dice el texto, te olvidas de lo que está atrás y lanzas hacia delante…
  • Descubres que estás llegando a la meta… Te está esperando y Dios guarda para ti el premio… Imagina el abrazo con él y que te entrega el trofeo. ¿Lo ves? Disfruta de los sentimientos…
  • Renueva la esperanza de poder afrontar con alegría las dificultades de la vida… Y siente a Dios cerca en estos momentos.

Y no olvides que ahora dios te dice:

TE QUIERO… TAL Y COMO TÚ ERES.

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