¿QUIÉN SOY? Una pregunta para toda la vida…

Nos movemos y hacemos cosas sin saber muy bien por qué las hacemos, e incluso prefiriendo no planteárnoslo. El problema está en que cuando dejamos de hacernos preguntas, cuando perdemos esa curiosidad por saber, cuando dejamos de cuestionar las cosas y funcionamos en modo piloto automático, es entonces cuando empezamos a aceptarlo todo pasivamente y dejamos de ser nosotros mismos.

¡Párate!, piensa las cosas, piensa qué estás haciendo con tu vida y por qué lo estás haciendo. Piensa si donde estás, lo que haces, cómo actúas, cómo eres… sale de ti mismo o más bien es por un dejarse llevar. Métete en líos pero no te líes. Haz mil cosas, pero piensa por qué las haces.

 

¡Déjate ser tú mismo!

 

 

La próxima semana…

Nos detendremos con el Señor, para pedirle que nos ayude a ver qué quiere de nosotros, qué cosas podemos mejorar y para pedirle perdón por el mal que hemos hecho y el bien que hemos dejado de hacer.

 

Haznos buscarte siempre

Señor, tú que nos diste el que te encontráramos
y el ánimo para seguir buscándote,
no nos abandones al cansancio ni a la desesperanza.
Haznos buscarte siempre y cada vez con más ardor.
Y danos fuerzas para adelantar en la búsqueda.

Manda y ordena lo que quieras,
pero limpia mis oídos para que escuche tu voz.
Sana y abre mis ojos,
para que descubran tus indicaciones.
Aparta de mí toda ignorancia
para que reconozca tus caminos.
Dime a dónde debo dirigir la mirada para verte a ti,
y así poder cumplir lo que te agrada.
Amén.

San Agustín

Print Friendly, PDF & Email